Después de lograr el apoyo de los asamblearios en la financiación del Espai Barça, Joan Laporta ha afrontado con éxito otra votación clave en su presidencia. La venta de hasta un 49% de Barça Studios que podría aportarle 50 millones de euros esta temporada, en la que los ingresos ordinarios todavía no se habrán recuperado de la Covid-19.
Por ello, la junta ha solicitado luz verde a los socios para tener la garantía de poder acometer la operación. A ello se sumarían entre 40 millones y 50 millones más que inyectaría el nuevo socio audiovisual del Barça para promover la productora. La votación se ha saldado con 397 votos a favor, 14 en contra y 10 en blanco.
“No es una cuestión de que lo hacemos porque estamos en crisis, lo hacemos porque hay mucho interés y nosotros no somos expertos; contratarlos en lugar de tener un socio de referencia nos saldría más caro”, ha defendido Laporta, que necesita esos 50 millones de euros en 2021-2022 para cuadrar el presupuesto de ingresos de esta temporada, como adelantó 2Playbook.
Sobre las razones para escindir este negocio y dar entrada a un socio, el presidente también ha recordado que “nosotros no somos una productora, somos un club de fútbol”. Además, si se cumple su hoja de ruta, conseguirían acelerar los proyectos en cartera con una inyección de 50 millones adicionales. “Nos hacen planes económicos a cinco años que son muy atractivos para la economía del club”, ha asegurado.
Pese a haber 17 potenciales inversores interesados, la venta no es segura, puesto que el CEO del club, Ferran Reverter, ya informó recientemente que podrían esperar a la 2022-2023, si no llegan ofertas atractivas al club, siempre que el ticketing aporte más de los 43 millones de euros previstos y lleguen nuevos patrocinios. Para eso es crucial cómo evolucione la asistencia ahora que el Camp Nou y el Palau Blaugrana pueden reabrir al 100% de su capacidad.
El primer ejecutivo blaugrana reconoce que “será una decisión financiera” porque la entrada de recursos no recurrentes es necesaria para cubrir la caída de facturación provocada por la Covid-19. Pero que en la toma de decisiones también es una cuestión “de futuro” y, “si podemos aguantar, aguantaremos”.
¿De qué dependerá? De la reapertura del Camp Nou y el Palau Blaugrana y en qué medida podrán funcionar a pleno rendimiento esta temporada, así como la entrada de nuevos ingresos por patrocinio. “Si se reactiva el estadio y nos dicen que, en un año, podemos conseguir 70 millones y no 50 millones de euros, esperaremos”, ha asegurado.
El presupuesto para 2021-2022 contempla 48,14 millones de euros por las cuotas de socios y abonados, a los que se suman 42,9 millones adicionales por recaudación en taquilla. Eso sí, es un escenario que ahora se presupone conservador, pues la estimación de ingresos se hizo con estadios al 40% de capacidad hasta la jornada 23 y, de ahí hasta el final de curso, al 60%. Por el contrario, la previsión del Gobierno es que se pueda subir al 80% del aforo antes de Navidad, lo que supondría un potencial extra de ingresos.
A ello se añade la renegociación de nuevos contratos de patrocinio, y Reverter ha anunciado que están muy cerca de anunciar una nueva marca que pagará 8 millones de euros anuales. También llevan meses negociando un nuevo proyecto vinculado a la creación de NFTs que complementen la emisión de tokens con Socios y su desembarco en la Superliga de League of Legends.
“Hay que ver si ahora es el mejor momento y cómo evoluciona la cuenta de resultados”, ha insistido Reverter, partidario de la venta por una simple razón: “El Barça no tiene experiencia en este ámbito; es un mundo nuevo y necesitamos un partner que nos ayude a crecer, porque no tenemos suficientes recursos para desarrollarlo y no los pondremos si no sabemos si irá bien”.
Barça Studios generaba más de 30 millones anuales en ingresos y tiene un ebitda positivo
La junta directiva blaugrana destaca la bondad de este movimiento corporativo porque “nos permitirá monetizar la inversión ya realizada” en este ámbito, donde sólo en tecnología se han invertido más de 15 millones de euros y 4 millones más en los estudios en sí. Según datos internos, esta línea de negocio generaba más de 30 millones anuales en ingresos, tenía un ebitda de 17 millones y contaba con una red de 120 colaboradores, como adelantó 2Playbook.
Tras los esfuerzos iniciales acometidos en los últimos cuatro años, el Barça espera que este paso consolide Studios como “una nueva fuente de ingresos relevante y regular para el Club, aprovechando la marca global más importante del mundo del deporte”.
Sin ir más lejos, el documental Matchday ha generado 6,4 millones de euros en ventas con plataformas como Netflix o Rakuten, más que doblando los 2,6 millones de coste que tuvo. En cuanto a Talent Explorers, su primera serie de animación con Sony Music Latin Iberia, se prevé que la inversión de 6 millones que exige se compense con 14 millones de ingresos en cinco años entre los derechos de emisión y la licencia de producto.
También está en marcha el docudrama sobre el Triplete de 2015 El Despertar junto a Brutal Media y TV3, y una serie de ficción junto al guionista Albert Espinosa que se inspire en la Masia. En total, ya se han estrenado quince producciones, entre películas, series y documentales, además de seis nuevos formatos en desarrollo y diez productos en proyecto.
“Nuestro objetivo es que haya más de cinco contenidos premium globales al año”, avanzaban los responsables del área audiovisual con la anterior junta a finales de 2020. Entonces, también se negociaba una potencial alianza con SpringHill Entertainment, la productora de Lebron James.
La creación y venta parcial de Barça Produccions es el segundo intento del club por dar entrada a inversores en algunos de sus negocios comerciales. El primer intento fue por parte de la junta de Josep Maria Bartomeu, que ambicionaba colocar el 49% de Barça Corporate, una mercantil a la que se iban a trasladar las divisiones de audiovisual, retail, innovación y academias. Las valoraciones realizadas por los fondos que llegaron a la fase final del proceso superaban los 400 millones de euros, como avanzó este medio.
Los cuatro grupos finalistas eran Blackstone, Abry Partners, Artos y un consorcio formado por Investindustrial, Elysian y Fanatics. Las cartas de intenciones se trasladaron a Goldman Sachs, el banco de inversión que está dando pulmón financiero al club y dirigía la venta, pero Laporta decidió frenar la operación por considerarla poco atractiva.
El actual presidente argumentó semanas atrás que todas las propuestas daban un valor nulo a las Barça Academies y al Barça Innovation Hub, realizaba una valoración baja de Barça Studios y “se alejaba de las expectativas por BLM”. Sobre el negocio de retail, también criticó que “la oferta que más se acercaba al valor que consideramos justo exigía meter dentro el contrato con Nike, y sólo eso nosotros lo valoramos en 500 millones de euros”.
A ello, Reverter ha añadido que BLM “no está preparada para la venta” porque, en su opinión, la gestión anterior impide tener una foto clara de su potencial. “La gestión no estaba bien hecha, así que no se podía hacer una valoración de existencias, ni calcular los márgenes; sin saber eso, no puedes poner la compañía a la venta y, una vez lo hayamos analizado, estudiaremos si vale la pena hacerlo”, ha indicado el primer ejecutivo.
El encargado de poner orden a esta línea de negocio es Jordi Balsells, que llegó a finales de junio procedente de Desigual; allí ocupó distintas posiciones en el área internacional hasta que en 2020 asumió la dirección general y de canales. En su llegada al Barça, el reto más inmediato será el de recuperar el pulso de las ventas, muy afectadas por el cierre de las tiendas durante la pandemia y el desplome del turismo en Barcelona.
De hecho, la ambición de la anterior junta directiva es que esta actividad ya superara los 80 millones de euros durante la última temporada, pero lo que se produjo finalmente fue un retroceso del 21% interanual, hasta 54,4 millones de euros.
