El Arsenal FC continúa lejos de alcanzar la sostenibilidad económica a la que ahora sí aspira la Premier League. El conjunto gunner cerró 2022-2023 con unas pérdidas de 52,1 millones de libras (61 millones de euros), lo que supone un aumento interanual del 14,5% y eleva su agujero en el periodo 2019-2023 a casi 300 millones de euros. En el caso del último curso, la dirección lo atribuye a una limpieza del valor de la plantilla y una sequía del mercado, que de no haberse producido habría aminorado los números rojos, pero no habría supuesto volver a la rentabilidad.
Sobre el encaje de estas cifras con las regulaciones actuales, la entidad sostiene que “sigue cumpliendo con las normas de sostenibilidad financiera establecidas por la Uefa y la Premier League”, asegurando que “la financiación la proporciona principalmente la empresa matriz última”, en referencia al holding deportivo de la familia Kroenke. “Durante el último año, proporcionó fondos tanto para respaldar las actividades de transferencia del club como para fines de capital de trabajo según fuera necesario”.
El Arsenal FC alcanzó una cifra récord de negocio de 543 millones de euros en 2022-2023
En términos de negocio, el Arsenal alcanzó una cifra récord de 464,6 millones de libras (543 millones de euros), lo que supone un 26% más que en 2021-2022. La principal partida fue la televisión, que aportó un 31% más que en el ejercicio anterior, con 191,2 millones de libras (223,5 millones de euros). La dirección lo atribuye tanto a su participación en Europa League, lo que supuso volver a recibir pagos importantes de Uefa, pero también al “sólido desempeño en la Premier League que se tradujo en mayores premios al mérito y fees por retransmisiones en directo”. En concreto, percibió 172 millones de libras (202 millones de euros).
El área comercial también capitalizó la mejora del rendimiento deportivo con “una nueva estrategia que generó resultados particularmente sólidos en las operaciones de retail”. En total, este departamento facturó 169,3 millones de libras (198 millones de euros) en 2022-2023, un 19% más interanual, con Adidas, con quien renovó el pasado curso hasta 2030, y Emirates como principales patrocinadores junto al destino turístico Visit Rwanda, que aparece en la manga de la camiseta. Además, en verano renovó hasta 2028 su acuerdo principal con la aerolínea emiratí y firmó un acuerdo con Legends para la explotación de eventos en el estadio.
También creció de forma importante la recaudación por matchday, que batió su anterior récord histórico (2014-2015). “El regreso del fútbol europeo significó que hubo 24 partidos en casa. […] En todos los partidos masculinos, la asistencia media fue de 60.082 aficionados (2022: 59.568)”, indica el club. Y eso se tradujo en unas ventas de 102,6 millones de libras (120 millones de euros), un 29% más que el año anterior.
La buena marcha del negocio ordinario no pudo ir acompañada de mayores plusvalías por traspasos, que antes de la pandemia fue un elemento clave para la sostenibilidad económica del Arsenal. Los gunners redujeron a la mitad sus ingresos netos por la venta de jugadores, situándose en 10,7 millones de libras (12,5 millones de euros), mientras que las cesiones aportaron 1,5 millones de libras extra (1,7 millones de euros), medio millón menos que en 2021-2022.
“Las ganancias por transacciones de jugadores continúan teniendo un impacto significativo en la rentabilidad general y la capacidad del club para obtener ganancias durante 2022-2023 se vio nuevamente afectada negativamente por las condiciones del mercado con una liquidez general reducida, ya que los presupuestos de adquisiciones de los clubes continuaron viéndose afectados por las presiones financieras posteriores a la pandemia”, admite la dirección.
Esta situación del mercado también obligó a deteriorar el valor de la plantilla del primer equipo, bien por el deterioro de algunos futbolistas o por su rescisión con amortizaciones pendientes de producirse. Esta operación tuvo un coste extraordinario de 18,1 millones de libras (21 millones de euros), que se sumó a los 139,1 millones de libras (162,6 millones de euros) de amortización ordinaria por fichajes realizados, un 9,5% más. A cierre de 2022-2023, el valor contable de la plantilla ascendía a 417 millones de libras (487 millones de euros).
Los costes salariales aumentaron un 10,6% interanual, hasta 234,8 millones de libras (274 millones de euros). “El aumento se debió principalmente a la inversión en salarios de los jugadores tanto en equipos masculinos como femeninos. También hubo un impacto por el aumento de la plantilla comercial y operativa”, sostiene la dirección, que no desagrega qué porcentaje va a personal deportivo y cuál a personal de oficinas.
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