Renovarse para marcar distancias en el inicio de una nueva era. Eso es lo que han buscado los principales clubes de eSports en España, los que se han consolidado en el ecosistema antes de la última revolución. El último ha sido Arctic Gaming, que ha apostado por un rebranding de su imagen para acercarse a nuevos verticales de negocio.

“Hemos notado que no terminaba de encajar en un sector en continuo cambio y crecimiento, y por eso vimos necesario un cambio de identidad que volviese a fortalecer los valores que transmitimos y permita reposicionarnos como uno de los grandes proyectos de nuestro país”, ha explicado Luis García, consejero delegado y cofundador del club.

“El rebranding surge de la necesidad de renacer la marca con la entrada en Valorant, juego clave para la estrategia del club, con presencia en la nueva liga de la LVP”, ha añadido. Hasta ahora, Arctic se había concentrado en desarrollar el proyecto de LoL junto a G2, el equipo G2 Arctic, que tiene su identidad propia.

Ahora el club busca diversificar tanto en juegos como en líneas de negocio y abrir la marca al lifestyle y el entretenimiento. En los siguientes meses se presentarán nuevos proyectos y acuerdos bajo la matriz, Arctic Gaming, en un año que espera ser de inflexión para su futuro a corto y medio plazo.

En el último año otros clubes como Giants y MAD Lions también han apostado por la fórmula del rebranding con un objetivo similar. Team Queso ha hecho lo propio tras aliarse con Fnatic en LoL y Team Heretics lo había hecho incluso antes de la pandemia. El gran reto: pasar de una marca y logotipo aún considerado amateur por sus directivos a uno profesional más moldeable a los verticales de negocio sobre los que ahora trabajan los clubes.